¡Cristo ha Resucitado! ¡Verdaderamente, ha Resucitado!

¡Cristo ha Resucitado! ¡Verdaderamente, ha Resucitado!

¡Cristo ha Resucitado! ¡Verdaderamente ha Resucitado! Por eso el apóstol Pablo, escribiendo a los corintios, no duda en afirmar categóricamente que, si Cristo no hubiera resucitado, vana sería nuestra fe; más aún, seríamos los más miserables de todos los hombres, pues todavía permaneceríamos en nuestros pecados (Cf. 1Cor 15, 17-19); pero esto no fue así porque ¡Cristo ha Resucitado! ¡Verdaderamente ha Resucitado! Y así, el Dios y Padre de Nuestro Señor Jesucristo nos ha bendecido en la persona de su Hijo con toda clase de bienes espirituales y celestiales destinándonos en Cristo, por pura iniciativa suya, a ser sus hijos» (cf. Ef 1,3.5). ¡Cristo ha resucitado! ¡Verdaderamente ha Resucitado!, ¡Qué […]