Monseñor Fernando José Castro Aguayo, obispo de la Diócesis de Margarita, en Venezuela, ha presidido la ordenación diaconal de Óscar Rafael Tineo Castillo, seminarista de esta misma diócesis, y que se ha formado los últimos cinco años en Bidasoa. Actualmente Óscar estudia la Licenciatura en Teología Moral; además, ha sido elegido Delegado de Estudiantes en la Universidad de Navarra.

En su homilía, don Fernando recordó, a propósito del pasaje de los Discípulos de Emaús, que «el ministerio diaconal está representado en la escena del Evangelio de hoy. Jesucristo hace de diácono para los discípulos, luego, ellos serán diáconos también. El diácono surge para ayudar, para estar al servicio».

D. Fernando continuaba señalando que «Jesucristo, inflamado de amor, se acerca a dos de sus discípulos para llenarlos del gozo de su presencia. Es verdad que todo cristiano a través de su trabajo debe acercarse a quien esté cerca. No hay que olvidar que los servicios sencillos que prestamos son verdaderos actos de diaconía, y en el caso de un diácono es natural el oficio de la caridad».

«Dios sólo espera de nosotros un corazón dócil. ¿Cuántas veces actuamos como si la sabemos todas? Van dos mil años de Iglesia. Nosotros veremos cosas mayores si somos fieles. Ante esta herencia cristiana nuestra respuesta personal es indispensable. Con humildad, quizás tenemos que decirle al Señor: Señor soy torpe y necio, dame tu gracia para ser un servidor al servicio de tu Iglesia en el mundo».

Sin Dios seríamos funcionarios. Con Dios somos otros Cristos.

Mons. Fernando Castro, obispo de Margarita-Venezuela.

Dirigiéndose al nuevo diácono, el obispo le destacó que «sólo puedes tener este espíritu de servicio, para dar consuelo al triste y acompañar a quien se siente desamparado. Es indispensable que el diaconado exige ser hombre de Dios por encima de todo».


Aplicando el Evangelio a la realidad concreta del camino sinodal que vive la Iglesia, don Fernando recordó que «la Iglesia se realiza en última instancia en las situaciones concretas, en las vivencias de cada uno. Hoy hay nuevos retos que hay que afrontar para proclamar a Jesucristo. Toda la evangelización de la Iglesia tiene una dimensión diaconal. El camino sinodal se manifiesta cuando los dos discípulos fueron a contar lo que habían experimentado, de cómo les había vuelto la esperanza porque estaba vivo y resucitado. Óscar, el señor quiere que en tu diaconía esté la esperanza como punto focal».

Al finalizar la Eucaristía hemos celebrado la ordenación de este hermano nuestro. Encomendamos a Dios su naciente ministerio, y felicitamos a la Diócesis de Margarita por este nuevo miembro de su clero diocesano. Adjuntamos una galería de fotos con algunos momentos que se vivieron durante esta jornada.

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