Pastoral de verano

Este verano hemos retomado el trabajo pastoral y social que desde hace algunos años se viene realizando en el Centro de Apoio a Deficientes João Paulo II. Este servicio pastoral que los seminaristas de Bidasoa realizan en este centro había sido suspendido por dos años debido a la Covid-19.

El Centro de Apoio a Deficientes João Paulo II forma parte de la Unión de Misericordias Portuguesas y está ubicado en Fátima. En este centro viven cerca de 120 personas de distintas edades y condiciones. El apoyo de nuestro seminario para este centro social se basa en enviar 2 grupos de seminaristas que colaboran por un periodo de 3 semanas cada uno, y que están conformados por aproximadamente 15 seminaristas más 1 formador que les acompaña.


Apoyar la labor social que se realiza en este centro ayuda a nuestros seminaristas a formarse humanamente haciéndose cercanos a las distintas necesidades de las personas. Sobre todo les ayuda a ser partícipes de la multiplicidad de formas que tiene la Iglesia de llevar el anuncio del amor de Cristo.


La jornada diaria comienza con la oración y la misa. El trabajo está organizado en ‘casinhas’, y consiste en ayudar en la limpieza que se realiza todas las mañanas, después se ayuda en el momento de dar la comida y la cena; los seminaristas colaboran paseando a los niños y se les anima con cantos y juegos.


Conversamos con algunos de los seminaristas que han formado parte de este primer grupo que ha viajado hasta Fátima para colaborar con el trabajo de este centro social. Uno de ellos es Ricardo Quevedo, seminarista de Venezuela, quien nos comenta que: «luego de la oración de la mañana, y mientras me preparo para comenzar la jornada, voy diciéndole al Señor: ¡que pueda verte hoy!»


Hablamos también con José Lucero, seminarista de Guatemala, él nos dice que: «ha sido una oportunidad para salir de nosotros mismos y entregarnos al servicio de los enfermos del centro y del equipo de cuidadores. Ver la vida que llevan ellos nos permite ser conscientes de lo mucho que Dios nos da y nos muestra los importante de la vida, abriéndonos la vista para ver todo lo que nos sobra. Terminamos los días cansados pero con el corazón lleno y encendido por días bien trabajados y sobre todo por el acompañamiento de la Virgen de Fátima en nuestro Rosario de cada día en el Santuario»

Y es que estando en Fátima, tan cerca de la casa de nuestra Madre Santísima en la Cova da iría, sería imposible que nuestros seminaristas no aprovecharan para acompañar a la Reina del cielo. Todos los días, por las noches, suelen participar de la procesión de velas. En una ocasión tuvieron la oportunidad de celebrar la misa todos juntos en la Capelinha de las apariciones, la misa fue presidida por D. José Ángel García, formador de Bidasoa quien acompaña a este primer grupo.

Durante este tiempo nuestros seminaristas han contado con días libres para poder conocer un poco más de Portugal, han visitado Lisboa y otras ciudades del país luso.

Comparte esta nota: